Nace en el caserío Curpa, cerca
de Acarigua, el que iría a ser general José Antonio Páez, prócer de la
Independencia, una de las figuras más famosas de la historia Patria. A Páez le
toco desempeñar un papel de primera en la gran batalla de Carabobo. Fue su
división la que decidió el triunfo del importante combate, con el que se logró
la independencia del país. Más adelante logro desalojar a los realistas de
Puerto Cabello, ultimo sitio ocupado por los españoles.
General en Jefe de la Independencia de Venezuela. Presidente
de la República en tres ocasiones. Se le conoció con algunos de los siguientes
calificativos: "El Centauro de los llanos", "El León de
Payara" y "El Taita". La historiografía tradicional lo ha
acusado (¿injustamente?) de traicionar a Simón Bolívar, por encabezar en 1826 el
movimiento denominado como "La Cosiata", el cual buscó separar a
Venezuela de la Gran Colombia. La figura de Páez dominó la escena política
venezolana a partir de la Batalla
de Carabobo en 1821, hasta el Tratado
de Coche en 1863, cuando concluyó la Guerra Federal.
El 24 de marzo de 1831 Páez
fue electo presidente constitucional de Venezuela por 136 votos de los 158
sufragantes surgidos de las asambleas electorales. En este primer gobierno,
llevó a cabo una labor organizadora del Estado, con medidas administrativas en
materia de impuestos, inmigración, liberalización del crédito, educación, orden
público, y asuntos internacionales. Durante este período, Páez enfrentó dos
crisis: la resistencia a jurar la constitución por parte del Arzobispo de
Caracas, Ramón Ignacio Méndez, que terminó con la expulsión de éste, y el
alzamiento de los generales José
Tadeo Monagas y José Gregorio Monagas (primero con el pretexto de restituir
la Gran Colombia y luego en favor de la autonomía de un Estado Oriental) que
fue contenido militarmente y concluyó con un convenio entre Páez y los jefes
orientales.
En 1835 entregó el poder a
su oponente José María Vargas.
Ese mismo año aplacó la insurrección militar conocida como la Revolución de las Reformas,
colocándose del lado del gobierno constitucional y del derrocado presidente. En
1838 fue electo para una segunda presidencia que asumió el 1 de febrero de
1839. En este nuevo mandato siguió ocupándose de la educación, el crédito
exterior, la deuda pública contraída por la antigua República de Colombia y
repatrió los restos mortales del Libertador. En enero de 1843, fue sustituido
en la presidencia de la república por el general Carlos Soublette.
En Calabozo, el 4 de febrero de 1848 inició Páez un
movimiento armado contra el gobierno de José Tadeo Monagas. En la batalla de
Los Araguatos (10.3.1848) fue derrotado por José Cornelio Muñoz, emigrando a
Nueva Granada, siguiendo a Santa Marta y de allí a Curazao. El 2 de julio de
1849 invadió Venezuela por la Vela de Coro; ofensiva que concluyó con su
captura en Macapo (Edo. Cojedes) por parte del
general José Laurencio
Silva, quien lo remitió a Caracas.
Monagas lo encarceló en el castillo de San Antonio de la Eminencia de Cumaná,
donde lo visitaron su esposa Dominga Ortiz y su hija; de allí salió el 23 de
mayo de 1850 al destierro.
Volvió a Venezuela el 18 de diciembre de 1858 a solicitud del
presidente Julián Castro y de la
Convención de Valencia, para que se encargue del ejército y de la pacificación
del país, convulsionado por el alzamiento de los promonaguistas, liberales y
federalistas. Cuando estos últimos proclaman la Federación el 20 de febrero de
1859 en Coro (Guerra Federal), el gobierno
central lo nombró jefe de operaciones en la Provincia de Carabobo; pero al no
obtener las amplias facultades que exigió, renunció en abril, y optó por
regresar a los Estados Unidos, país en el que había estado durante su
destierro. A su regreso, fuerzas conservadoras leales a él derrocaron al
presidente constitucional, Pedro
Gual, y Páez lo sustituyó como Jefe Supremo de la
República, el 10 de septiembre de 1861. Las consecuencias de este golpe de
Estado repercutieron hondamente desde entonces en la historia del país ya que
por primera vez alguien recurría exitosamente a la dictadura violentado la
constitución y las instituciones republicanas por motivos meramente
personalistas. Esta acción sentó un claro precedente de cómo alguien, con
suficiente poder y evocando supuestas razones superiores a la ley, podía pasar
por encima de los poderes constituidos sin problema alguno; un legado que no
tardó en ser practicado por otros caudillos venezolanos. Todo el año 1862 y
parte de 1863, condujo El Centauro de los Llanos la guerra contra los federalistas
encabezados por Juan
Crisóstomo Falcón. Finalmente el Tratado de Coche
pone fin a las hostilidades en abril de ese año. Páez gobernó nominalmente en
Caracas hasta mediados de junio; el 13 de agosto salió de Venezuela por tercera
y última vez, estableciendo su residencia en los Estados Unidos.
En su exilio se dedicó a viajar y escribió su autobiografía.
El 13 de julio de 1867, el gobierno de Venezuela le expidió el diploma que lo
acreditaba como Ilustre Prócer de la Independencia Suramericana. El 6 de mayo
de 1873 murió en Nueva York. Sus restos fueron repatriados y sepultados en el
Panteón Nacional, el 19 de abril de 1888.