Este Día Internacional de las Mujeres y las Niñas en
la Ciencia es una oportunidad para que todos tomemos posición en favor de las
mujeres y las niñas en la ciencia.
Las niñas se siguen enfrentando a estereotipos y
restricciones sociales y culturales, que limitan su acceso a la educación y la
financiación para la investigación, impidiéndoles así cursar carreras
científicas y desarrollar todo su potencial. Las mujeres son una minoría en la
investigación científica y la adopción de decisiones en materia de ciencias.
Ello ensombrece todos los esfuerzos por realizar la Agenda 2030 para el
Desarrollo Sostenible y el Acuerdo de París sobre el Cambio Climático, en los
que se pone de relieve el papel esencial de la igualdad de género y la ciencia.
Al mismo tiempo, las niñas y mujeres cargan con las
peores consecuencias de la pobreza y la desigualdad, ya que están en la primera
línea frente al cambio climático, comprendidos los desastres derivados de
peligros naturales. Las niñas y mujeres de las zonas rurales y desfavorecidas
son las que resultan más afectadas.
Para lograr avances considerables, hay que empezar
por reconocer los derechos y la dignidad de las mujeres fomentando su ingenio y
capacidad de innovación.
Este mensaje se transmitió durante las dos últimas
Conferencias de las Partes en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre
el Cambio Climático (COP 21 y COP 22). La humanidad no se puede permitir
ignorar a la mitad de su genio creador.
Se debe empoderar a las niñas y mujeres en todos los
ámbitos del aprendizaje y la investigación, desde la administración hasta la
enseñanza, en todas las disciplinas científicas. Ese objetivo es la base del
manifiesto en favor de “La mujer y la ciencia” que la UNESCO puso en marcha el
pasado año con la Fundación L'Oréal, para que los gobiernos y las partes
interesadas se comprometan a promover la plena participación de las niñas y las
mujeres en la ciencia. Debemos estimular a las niñas y muchachas ofreciendo
oportunidades de asesoramiento a las jóvenes científicas a fin de ayudarlas en
el desarrollo de sus perspectivas de carrera. Debemos dar a conocer mejor la
labor de las científicas brindando las mismas oportunidades para que participen
y ejerzan su liderazgo en una amplia gama de organismos y actos científicos de
alto nivel.
El mundo necesita a la ciencia y la ciencia necesita
a las mujeres. Invitamos a todos a firmar este manifiesto. Juntos podemos
cambiar las cosas
Fuente: Irina Bokova Mensaje con motivo del Día
Internacional de las Mujeres y las niñas en la Ciencia, 11 de febrero de 2017