Tal día como hoy, hace 148 años, falleció en
Caracas Luisa Cáceres Díaz de Arismendi, heroína de la Guerra de Independencia
de Venezuela, esposa del General Juan Bautista Arismendi, quien fue torturada, encarcelada
ilegalmente y desterrada a España, para ejercer presión sobre la causa
patriota, y cuya resistencia a abandonar los ideales independentistas de
Arismendi o de apoyar a los realistas para desmoralizarlo, le ganaron un lugar
en el Panteón Nacional de Venezuela.
Tras contraer matrimonio en 1814, fue
arrestada y trasladada al Castillo Santa Rosa luego que Arismendi se sublevara
en noviembre de aquel año. En medio de la encarnizada lucha entre patriotas y
españoles, y mientras se hallaba en prisión, Luisa Cáceres dio a luz una niña
que murió al nacer el 26 de enero de 1816.
Fue trasladada al fortín de Pampatar el 29 de
enero y el 22 de marzo a la prisión de La Guaira, desde donde fue enviada al
Convento de la Concepción de Caracas, y mantenida en custodia hasta el 3 de
diciembre, fecha en que fue remitida en el buque "El Pópulo" hacia
Cádiz, España. Llegó a Cadiz el 17 de enero de 1817, tras un viaje plagado de
adversidades, y se negó a firmar un documento para manifestar su lealtad al Rey
de España y rechazar la posición rebelde de su marido.
Escapó de prisión ayudada por simpatizantes
de la causa patriota y regresó a Margarita, donde llegó el 26 de julio de 1818,
4 años después de haber sido arrestada. Luisa Cáceres de Arismendi residió en
Caracas en relativa oscuridad hasta el día de su muerte. El 24 de agosto de
1876 se convirtió en la primera mujer en ser exaltada al Panteón Nacional.