La Batalla de La Victoria fue
una batalla de la Guerra de independencia de Venezuela,
en la que fuerzas realistas al mando de José Tomás Boves intentaron tomar la ciudad de La
Victoria.
La batalla se
libró el 12 de febrero de 1814. Ante la escasez de tropas regulares, Ribas tuvo
que armar a unos mil estudiantes de los colegios y seminarios de la ciudad y de
los otros poblados vecinos, entre ellos 85 estudiantes del Seminario de Santa Rosa de Lima de Caracas.
Antes de entrar en batalla, el general Ribas arengó a los adolescentes que lo
acompañaban, finalizando con estas palabras
Soldados: Lo que tanto hemos deseado
se realizará hoy: he ahí a Boves. Cinco veces mayor es el ejército que trae a
combatirnos; pero aún me parece escaso para disputarnos la victoria. Defendéis
del furor de los tiranos la vida de vuestros hijos, el honor de vuestras
esposas, el suelo de la patria; mostrarles vuestra omnipotencia. En esta
jornada que será memorable, ni aun podemos optar entre vencer o morir:
¡necesario es vencer! ¡Viva la República!
La batalla
comenzó a las 7:00 am de la mañana y duró todo el día en las calles de la
ciudad. Los efectivos republicanos construyeron una impresionante resistencia
al empuje de las tropas realistas en ese momento al mando de Francisco Tomás Morales. Al caer la
tarde, la batalla aún no se había decidido por ninguno de los dos bandos.
Cuando la refriega arreciaba, los patriotas reciben un refuerzo de 220 soldados
de caballería a cargo de Vicente
Campo Elías, procedente de San Mateo que rompe el cerco realista. Horas
después, Morales y los suyos se retiraron del combate perseguidos por los
jinetes republicanos. A consecuencia de esta batalla fracasa el intento
realista de cortar las comunicaciones entre Caracas y Valencia.
Bolívar, al
saber la victoria, le concedió a Ribas el título de "Vencedor de los
Tiranos".
El 12 de febrero de 1947,
la Asamblea Constituyente decretó celebrar cada aniversario de la batalla como
el Día de la Juventud, en honor a los jóvenes que lograron esta
importante victoria. En la plaza principal de La Victoria, hoy llamada
"Plaza José Félix Ribas" se colocó un monumento, esculpido por Eloy Palacios, inaugurado en 1895, que
representa a Ribas dando indicaciones a unos jóvenes sobre el manejo de un fusil.